Riviera Maya: Ruta de 10 días para saborear el caribe de México

¡México lindo y querido! Recién llegados tras un mes en el país y ya lo echamos de menos. Este primer post, lo dedicamos a la ruta por la Riviera Maya (estado de Quintana Roo) que realizamos en 2019. México es mucho más que Riviera Maya, aunque para muchísima gente es el primer contacto con el país norteamericano.

Cuántas veces habíamos dejado de lado un viaje a México porque no teniamos el suficiente tiempo que queríamos dedicarle… infinitas. Nuestra idea de recorrer el país, siempre había sido dedicarle un mes entero al centro y sur de México. Por unas cosas y otras nunca habíamos tenido la oportunidad hasta la fecha y la verdad es que no nos arrepentimos.

Nuestro ideal de viaje casi nos los sabemos de memoria y es bastante ambicioso: de Baja California a Quintana Roo pasando por Jalisco, Guanajuato, Michoacán, Ciudad de México, Puebla, Oaxaca, Chiapas, Campeche y Yucatán. Ese había sido nuestro primero de la lista desde hace un tiempo y ahora hemos podido cumplir en parte. Esperamos volver una tercera vez más pronto que tarde y poder visitar lo que nos falta. (Actualizado 2022: Hemos podido visitar todos estos estados en dos viajes distintos. Todavía no hay posts pero no dudes en preguntarnos)

Ruta Riviera Maya

Por contra, en Febrero de 2019 en tiempos pre-pandemia y para celebrar el cumple de Ely, decidimos darnos un garbeo por allí. Fue así como hace un par de años nos llevamos nuestras primeras sensaciones mexicanas. Realizamos una pequeña ruta por los estados de Yucatán, Quintana Roo y a la archiconocida Riviera Maya.

En apenas 10 días alquilamos un coche de alquiler y vimos algunos de los puntos más emblemáticos. Entramos y salimos por la turística ciudad de Cancún. Chichén Itzá, Tulum, Holbox, Valladolid, cenotes, playas… la oferta es variada y enorme.

Isla Holbox

A día de hoy la isla de Holbox, en el litoral de la punta norte de la península de Yucatán, está en la delgada línea que traspasa lo turístico sostenible a lo turístico en término peyorativo. Todavía se puede disfrutar de la tranquilidad de esta isla de fina arena blanca y playas de azul turquesa de manera sosegada, pero la rápida construcción de más y más hoteles hacen temer lo peor.

A nosotros nos gustó mucho, como comento todavía está muy lejos del ajetreo de Riviera Maya o de Cancún y sus macro hoteles. El concepto es distinto, pequeñas palapas de madera, hoteles de planta baja, restaurantes locales y bastante espacio de naturaleza para caminar. Esperamos que siga así. Holbox era una antigua isla pesquera que se dedicaba sobretodo a la langosta y aunque hoy sea distinta, todavía guarda ese espíritu más sosegado.

Holbox pertenece al Área Protegida de Flora y Fauna de Yum Balam. Esta zona está llena de manglares y avifauna y el pequeño ecosistema puede ser alterado fácilmente si la isla se desarrolla demasiado.

Uno de los reclamos de la isla es el avistamiento de tiburón ballena en época (de finales de Mayo a principios de Septiembre), el cual en ocasiones puede verse en agrupaciones de bastantes ejemplares. En cualquier caso, conviene informarse con que agencia realizar este tour, ya que hay muchas que no garantizan un turismo responsable con estos animales, al igual que en Oslob, Filipinas.

Qué ver en Holbox

El pueblo de Holbox es una población agradabla para pasear, con sus carreteras de arena (que se inundan tras las lluvias), restaurantes locales al borde del mar, tiendas y sus murales coloridos con motivos que se encuentran en algunos edificios.

Partiendo del pueblo, los dos puntos más conocidos son Punta Cocos y Punta Mosquitos que se sitúan en dirección al suroeste y al noreste respectivamente. Para llegar, se puede alquilar un carrito de golf para los más vagos, o dar un largo paseo por la playa y disfrutar del aire. Estos dos lugares son lo que todo el mundo viene buscando aquí: playa de arena blanca, mar turquesa y hamacas en la misma orilla.

El otro tour más conocido es el llamado 3 islas: Isla Pájaros, Isla de la Pasión y Cenote Yalahau. Se enfoca en el snorkel y el avistamiento de aves en puntos alejados a unos 30 minutos del pueblo principal.

Cómo llegar a Holbox

No hay otra forma de llegar a esta isla que tomar el ferry en Chiquilá, la última población costera de Yucatán que se sitúa más próxima. Desde aquí salen desde las 6 am hasta las 21:30 pm y cada media hora, los ferrys de las dos empresas (9 hermanos y Holbox Express). Estos se se van turnando cada media hora y el precio es de 150 pesos sólo ida tardando unos 25 minutos.

Para llegar a Chiquilá se tardan unas 2 horas desde Cancún, 2h 30 desde Playa del Carmen si se viene en coche de alquiler y también hay transporte en bus. En Chiquilá existen numerosos parkings seguros donde poder dejar el coche por días 50 pesos cada 12 horas.

Dónde dormir en Holbox

La oferta de alojamiento es variada y la mayoría de hoteles para turistas están en primera o segunda línea de playa. Suelen ser construcciones de planta baja que sin ser mega resorts guardan todas las comodidades. En nuestro caso nos alojamos en el Beachfront Hotel La Palapa y nos gustó bastante. Muy cerca del centro de Holbox pero a pie de playa y con habitaciones amplias y limpias.

Si te quieres pegar el gustazo, aunque sea más caro y algo más alejado del centro, nos gustó mucho la que era nuestra primera opción, el Hotel Las Nubes de Holbox. Lástima que nos quedamos sin plaza…

Dónde comer en Holbox

Isla Holbox es un buen lugar para probar los platillos típicos de México pero con un toque costero o caribeño por así decirlo. Nuestra recomendación es no dejar de probar los tacos de pescado, los ceviches y el pulpo. El lugar que más nos gusto es el Restaurante Las Panchas, lleno de locales y a muy buen precio. Las raciones son enormes por cierto.

Para probar los tacos nos gustó mucho Taco Queto, un clásico de la isla. También Barba Negra tiene tacos muy elaborados con distintas tortillas como la de maiz negro.

Pizzeria Edelyn es famoso por su pizza de langosta «típica de la isla» o el Viva Zapata para el marisco. Yo personalmente no soy mucho de fusiones y lo de ver una langosta en una pizza como que no. A parte que para los días que voy a estar de vacaciones en un país, me gusta probar la comida local.

Al parecer, el consumo de langosta en la isla se ha disparado con la llegada de turistas. El problema reside en que otros habitantes del mar que se alimentan de este crustáceo se están quedando sin ello. Es una observación personal, pero si puedo ahorrarme fastidiar un poco más el ecosistema me lo ahorro.

Valladolid

Una ciudad fácil de recorrer rica por su artesanía y gastronomía yucateca situada en pleno centro de la Península de Yucatán. Valladolid es tras Mérida y Campeche la tercera ciudad de la península mexicana. Dada su posicion en el mapa muy cercana a la Riviera Maya, resulta un punto base perfecto. Desde aquí se puede visitar fácilmente Chichén Itzá, Ek Balam y Cobá así como la reserva natural de Río Lagartos o los numerosos cenotes que rodean la ciudad.

Qué ver en Valladolid

Al tratarse de una ciudad pequeña, Valladolid es fácil de recorrer a pie sin grandes caminatas. El punto neurálgico es el Parque Francisco Cantón Rosado como plaza principal y la Parroquia San Gervasio que lo secunda. A partir de aquí se abren toda una serie de calles en forma de cuadrícula. Podemos ver iglesias, casonas bajas y patios coloniales con las fachadas en colores pastel, quizás la estampa más reconocida de Valladolid.

La Calzada de los Frailes, cercana al parque principal, es el mejor ejemplo para ver este tipo de arquitectura colonial. Resulta un agradable paseo y está llena de galerías y restaurantes, hasta confluir al Parque Sisal y al Convento San Bernardino de Siena.

Para los amantes de la artesanía se puede visitar la Casa de los Venados, con una colección de más de 3000 piezas de arte de este país. Resulta curioso que uno de los cenotes de Valladolid está en el mismo centro, el cenote Zací, como se conocía antes a la ciudad. A tan sólo dos calles de este cenote está el Mercado Municipal, que siempre es una buena forma de adentrarse en la cultura local de un país y más aún en México.

Dónde dormir en Valladolid

Nuestra opción en Valladolid, fue el Zentik Project Boutique Hotel & Spa. A pesar de su largo nombre no es un lugar super lujoso pero sí para pegarse un lujazo, me explico… A poca distancia del Mercado Municipal se sitúa en un lugar tranquilo con pequeñas construcciones con amplias habitaciones, una piscina con un pequeño spa y lo mejor de todo… una cueva subterranea.

En efecto, durante 24 horas el hotel tiene mediante acceso de unas escaleras, una cueva inundada para bañarte entre 34 y 37 grados y que durante la noche iluminan con velas. Es una gozada y el precio no es exagerado. A parte, tienen un restaurante muy bueno para una ocasión especial que trabaja con productos locales la gastronomía yucateca.

Dónde comer en Valladolid

En Valladolid tuvimos una revelación cuando descubrimos el Mesón del Marqués, el restaurante de la Hostería del Marqués situado en plena plaza principal de la ciudad. El patio colonial donde se sitúa el salón principal del restaurante, es precioso, lleno de plantas y decoración con utensilios de antaño y frutas y hortalizas.

Qué decir de la comida típica de la región de Yucatán: papadzules, panuchos, cochinita pibil, salbutes… todos en una carta variada y de raciones abundantes sin ser cara en excesivo. Estuvimos celebrando el cumpleaños de Ely y quedamos muy contentos, además de la visita sorpresa del Mariachi Águila de Valladolid que fue el broche de oro final.

Otro lugar para comer bien y barato lo tuvimos en El Sazón de Valladolid. Regentado por una familia que nos trataron como reyes. Uno de aquellos sitios con las «tres B» que te recuerdan a la comida casera de tu madre o abuela. Por supuesto, cocina mexicana 100%.

Cenotes de Valladolid y alrededores

No se puede pensar en la península de Yucatán sin sus cenotes, esas cavidades que dejan esta zona de México como un queso Gruyère en su interior. Valladolid especialmente tiene algunos de los más bonitos en sus alrededores, aunque la oferta es inmensa.

Los hay de muchos tipos y formas y por lo general, se visitan para darse un baño o para realizar buceo, otro tema que tocaremos en otro post. Los hay abiertos, cerrados o de gruta, profundos o superficiales, en cueva o en poza… para todos los gustos.

Este tipo de cavidades de origen kárstico tienen su máximo exponente en esta parte de México y ya existían desde que los mayas dominaban estas tierras aunque también están presentes en otros lugares del mundo como Bahamas, Australia o Florida.

Cenote Ik Kil y Cenote Sagrado

Quizás el más famoso de todo el país, simplemente porque se encuentra a poca distancia de Chichén Itzá y la mayoría de gente pasa por él. Se trata de un cenote en forma de poza y abierto, por tanto más antiguo, con la vegetación cayendo por sus costados. Realmente es precioso, incluso ha servido para rodar anuncios, pero la cantidad de gente que hay le quita encanto.

Si uno consigue evadirse en el agua y mirar hacia arriba realmente impresiona. El lugar dispone de restaurantes, vestuarios, souvenirs y de un gran parking ya que hasta aquí vienen tours de todo tipo. El precio de entrada son 80 pesos.

Como nadie que pasa por Riviera Maya deja de pasar la visita a Chichén Itzá, a buen seguro que el Cenote Sagrado es parada obligatoria, ya que se encuentra dentro del recinto arqueológico. No es apto al baño, pero al ser abierto puede verse desde arriba a la perfección. En este cenote en forma de poza se han encontrado muchos restos arqueológicos ya que los mayas de la ciudadela lo utilizaban para sus rituales.

Cenotes Xkeken y Samula

Ambos están situados a pocos km al suroeste de Valladolid y separados entre sí por apenas unos metros a recorrer a pie. El precio de la entrada es 125 pesos por ambos y vale mucho la pena. El ambiente es completamente distinto a Ik Kil, donde no se encuentra a casi nadie o a nadie si se va en horas tempranas.

Por contra son dos cenotes semiabiertos, en forma de gran cueva con una obertura que da al exterior en el techo e ilumina toda la cámara, precioso. El agua es cristalina donde meterse un baño casi en silencio y maravillarse con las formas del interior.

Otros cenotes de Valladolid

Como hemos dicho a pocos km alrededor de Valladolid hay cenotes para todos los gustos y de todos los colores. No muy lejos de los dos anteriores está el cenote Hacienda Selva Maya y un gran grupo de ellos se sitúa al norte de la ciudad en la carretera con forma de media luna entre Valladolid y Ek Balam. Aquí están los cenotes Hubiku, Palomitas, Agua Dulce, Xcanahaltun y Suytun.

Cenotes de Riviera Maya y Quintana Roo

Si por cualquier casual en tu viaje a Riviera Maya no llegas hasta la ciudad de Valladolid, existen un montón de opciones en Quintana Roo a lo largo de toda la costa. En los alrededores de Playa del Carmen y Tulum están algunos de los más famosos cenotes de México. En este post hablamos también de los cenotes alrededor de Mérida.

Hay alrededor de 10000 cenotes en la Península de Yucatán, muchos de ellos aún por descubrir y sólo en Quintana Roo forman un sistema cavernario de 61 km. Esto da lugar a la modalidad de buceo en cenote o caverna que se ha desarrollado especialmente. Aquí están algunos de los mejores en esta disciplina.

Si te gusta bucear como a nosotros, no te puedes ir de allí sin hacerlo en algún cenote. Desarrollamos este tema en este otro post, pero en cualquier caso dejamos aquí abajo marcados los cenotes donde se suele practicar buceo.

Entre Puerto Aventuras y Xpu Ha: Ponderosa o Eden (buceo), Cenote Azul, Chac Mool (buceo), Tajma Ha (buceo), Chikin Ha (buceo)

Tulum y alrededores: Gran Cenote (buceo), Car Wash (buceo), Dos Ojos (buceo), Dream Gate (buceo), Casa Cenote (buceo), Pet Cemetery (buceo), El Pit (buceo), Angelita (buceo), Calavera (buceo)

Zonas arqueológicas mayas

El abanico de recintos arqueológicos pertecientes a la civilización maya es variado y extenso ya no sólo en México, sino también en los países vecinos Guatemala, Belice, Honduras y El Salvador. De todas las civilizaciones antiguas, personalmente me atraen bastante las precolombinas por sus misterios, su inteligencia, arquitectura y simbolismo. Ya antes de venir a México nos quedamos impresionados con la magnificencia de Tikal en Guatemala, así que en este viaje intentamos ver alguna muestra de ello en Chichén Itzá, Tulum y Cobá con resultados dispares.

Chichén Itzá

Siendo Patrimonio de la Humanidad y una de las 7 Maravillas del Mundo moderno desde el 2007 no podíamos dejar de verlo, por muy subjetivas que sean este tipo de nominaciones. Seguramente el recinto de Chichén Itzá con su Pirámide de Kukulkán (El Castillo) sea el yacimiento más visitado por todo aquél que visita la Riviera Maya, hasta para el más playero. Venir hasta aquí y no verlo es pecado mortal.

Bien situado entre la costa caribeña y el Golfo de México y cercano a la localidad de Pisté, alcanzó su máximo esplendor en el periodo post clásico de la civilización maya con una arquitectura monumental con fines ceremoniales.

A parte de la ya mencionada Pirámide de Kukulkan como imagen icónica del lugar existen otros edificios con relieves espectaculares y bastante bien conservados como el Observatorio El Caracol, el Templo de las Mil Columnas, el Templo de los Guerreros o el Gran juego de Pelota (el más grande del mundo maya).

El recinto es bastante grande y con caminos interconectados entre el bosque que llevan de un edificio a otro. Entre medio hay una amalgama de puestecitos de souvenirs, artesanía, camisetas… que quizá quita tranquilidad y encanto al lugar, pero mirándolo por el lado positivo es uno de los lugares donde hay más variedad y mejores precios para hacernos con algún recuerdo.

El precio de la entrada se dobló en el 2019 y pasó a ser de 481 pesos para extranjeros y actualmente en 2022, llegó a 537 pesos con otra nueva subida. Un consejo que aunque obvio no siempre se hace, es llegar temprano. El hecho de no tener casi a nadie en la Pirámide de Kukulkan hace que merezca la pena entrar a primera hora.

Tulum

Como recinto arqueológico, las ruinas mayas de Tulum tienen el plus del paisaje y el entorno que las rodean. Esta antigua ciudadela amurallada del período postclásico era una auténtica fortaleza con vistas al mar, precisamente es lo que la hace distinta a cualquier otra del mundo maya. Un Mar Caribe de color turquesa llega hasta sus pies en una costa algo escarpada y perfecta para defender las atalayas y palacetes principales.

No es enorme en dimensiones y se recorre fácilmente por un recorrido ya marcado que bordea las antiguas murallas y la costa. Algunos de los edificios principales son el Templo del Dios del Viento con magníficas vistas, el Palacio, el Castillo (la atalaya más alta del lugar) y el Templo de las Pinturas.

Ya no quedan los colores vivos que decoraban los edificios a la llegada de los españoles, salvo alguna pequeña restauración en el Templo de las Pinturas y algo de ornamentación con serpientes emplumadas como en Chichén Itzá.

También existe la posibilidad de descender a un par de pequeñas calas a pies de la estructura aunque se suelen llenar de gente. Las ruinas de Tulum se sitúan en la población del mismo nombre, en pleno centro de la Riviera Maya y Quintana Roo, la oferta de todo es enorme. El precio de la entrada son ya 100 pesos mexicanos.

Cobá

Entre la costera Tulum y la ciudad de Valladolid se encuentran las ruinas mayas de Cobá, perdidas en una extensión de bosque húmedo en las tierras bajas de Yucatán. No tienen nada que ver con las dos anteriores ya que son mucho más antiguas, del final del periodo clásico. Sin tener la espectacularidad de Tikal, se asemeja a ella en las pirámides y las estelas que encontramos en el lugar y los caminos que unen los monumentos (saché).

Cobá se divide en varias zonas y para verlas todas hay que andar bastante entre ellas. Existen 4 grupos diferenciados de ruinas: Grupo Cobá, Grupo Macanxoc, Grupo de las Pinturas y Grupo Nohoch Mul. En este último grupo se encuentra el Juego de Pelota y la Pirámide Nohoch Mul, a la cual se puede subir por sus empinados escalones con la ayuda de una cuerda. Son 42 metros que una vez se consiguen subir, te regalan una vista de todos los bosques circundantes muy bonita.

Para ir más rápido existen bicitaxis y posibilidad de alquiler de bicis pero con el calor que hace, nosotros preferimos tranquilamente hacerlo andando. De hecho, la canitdad de bicis que recorrían los caminos nos llegó a abrumar un poco. Entre eso y lo deterioradas que estaban algunas estelas y pirámides nos dejó un poco a medias. Seguramente si no se han visto otras zonas mayas o se empiezan por ellas Cobá es una buena opción. El precio es de 80 pesos mexicanos.

Otras zonas arqueológicas mayas

Más allá de estas tres tan visitadas por su cercanía a la costa, hay un gran número de lugares para hacerte con toda la «colección». La zona arquológica de Palenque o Yaxchilan y Bonampak escondidos en la Selva Lacandona, todas en el estado de Chiapas, son espectaculares por el entorno en el que están y su importancia histórica.

En mitad de una Reserva de la Biosfera y bastante aislada en el actual estado de Campeche, encontramos la grandiosidad de Calakmul, que rivalizaba en aquellos tiempos con la vecina guatemalteca Tikal. Así como Edzná, muy avanzada a nivel tecnológico.

Uxmal y la Ruta Puuc con su crestería son una maravilla en Yucatán, pero de todas estas hablaremos en otros post dirigidos a estos estados que conforman el resto de la Península de Yucatán y el mundo maya.

Mejores playas de Riviera Maya

No hay que engañarse, en Riviera Maya resulta igual de complicado encontrar playas feas que playas solitarias y tranquilas donde poder disfrutar del baño. La belleza del lugar contrarresta con la cantidad de turismo que llega cada año hasta aquí y los derechos que tienen algunos resorts para algunas playas. En cualquier caso, buscando un poco hay playas para todos los gustos.

Tulum

De sur a norte siguiendo esa costa de aguas esmeraldas que nos ofrece la Riviera Maya, comenzando en la población de Tulum nos encontramos con Playa Paraíso y Playa Pescadores que continúan una detrás de otra. Se trata de la zona hotelera de la población con hoteles de playa y restaurantes en toda la línea de costa. El pueblo y el yacimiento arqueológico quedan a menos de 6 y 3 km respectivamente.

Xcacel

Más al norte, en la localidad de Chemuyil se encuentra la playa de Xcacel, en un Área Natural Protegida Estatal para el desove de tortugas. Más salvaje y solitaria tiene cierto oleaje pero es bien bonita y no es tan visitada. Justo allí se encuentra el Cenote Xcacelito para tener un 2X1.

Akumal

Siguiendo el recorrido llegamos hasta Akumal, el que fuera un antiguo pueblo pesquero convertido en uno de los principales destinos turísticos de la Riviera Maya. A parte de la bonita franja costera es famoso por la posibilidad de avistamiento de tortugas cerca de la orilla ya que es una zona con praderas, de las cuales se alimentan.

Hasta el 2019 la gente realizaba snorkel por su cuenta en la bahía de Akumal, pero ahora han acotado esta zona para los tours de snorkel para ver tortugas, ya que se necesita un guía y el número de personas se ha restringido debido al alto número de turistas.

Las tortugas había llegado un punto en que desarrollaban estrés o tumores por el contacto de la gente que no paraba de tocarlas untados de protector solar. Corren fotos por Instagram e Internet de gente subida encima, tocando o abrazando una tortuga… una puñetera aberración.

Hoy en día hay que pagar 100 pesos por entrada a la bahía y 450 pesos por el tour con guía. Nosotros particularmente no fuimos, no creemos que sea el lugar más indicado para ver estos animales a parte del pastizal. ¡Mucho mejor bucear en algún lugar y encontrarlas de casualidad!

Xpu Ha

Quizás sea una de las más bonitas de toda la Riviera Maya. Está dividida en una parte con más movimiento de restaurantes y otra más tranquila. Se encuentra en una perfecta ubicación a igual distancia de Playa del Carmen que de Tulum y es la típica playa de arena blanca y fina con agua turquesa siempre que el tiempo acompañe. Cerca de Xpu Ha se encuentran algunos cenotes como el Cenote Azul, el Cenote Cristalino o el Cenote Chikin Ha.

Aquí fue donde nosotros nos alojamos en nuestros días de costa y la verdad es que acertamos de lleno. Una bonita playa, con algunos resorts que sin ser grandes macrocomplejos tenían todo lo necesario, en una zona más tranquila que Cancún, Playa del Carmen, Akumal o Tulum.

Paamul

Se trata de una pequeña bahía solitaria exenta de grandes resorts. Al parecer en Paamul, tan sólo hay un aparthotel que tiene el derecho a la playa privada. Estuvimos a punto de alojarnos aquí, es de aquellos rincones que quedan todavía entre tanto turismo masivo.

Playa del Carmen

Es casi imposible no pasar por Playa del Carmen en algún momento y por eso la añadimos a la lista. Tiene una oferta hotelera inmensa y es una de las ciudades en el mundo que crece a pasos agigantados. A pesar de ello no es que tenga las mejores playas.

En nuestro caso pasamos ya que aquí es donde se encentran la mayoría de centros de buceo y es casi inevitable pasear un rato por la famosa Quinta Avenida llena de restaurantes, souvenirs y precios inflados. Es suficiente con salir unas calles arriba o abajo y encontrarse de lleno con taquerías auténticas y un pellizco de México.

Cozumel

A pesar que no pudimos visitarla, pensamos que debe estar en la lista. La isla de Cozumel se encuentra a poca distancia frente a Playa del Carmen desde donde salen los ferrys. Esta isla es Reserva de la Biosfera gracias al Parque Nacional de Arrecifes de Cozumel, el buceo es quizás la actividad más importante del lugar. A parte tiene bonitas playas resguardadas del sargazo y el viento. En este post hablamos un poco de la zonas de inmersión más conocidas de la isla.

Punta Maroma

Este pequeño saliente a medio camino de Cancún y Playa del Carmen ofrece una de las mejores playas de la zona. Punta Maroma es una buena opción para pasar alguna noche al principio o al final de la ruta como hicimos nosotros, ya que tiene hoteles de gama media a buen precio en un lugar muy bonito.

Dónde dormir en Riviera Maya

Como hemos comentado antes dividimos los días en la Riviera Maya en dos zonas: Xpu Ha y Punta Maroma. En Xpu Ha nos alojamos en el Catalonia Royal Tulum Beach & Spa Resort ya que estábamos de celebración y la verdad es que el lugar nos encantó. Se trata de un hotel todo incluido no muy grande, en un lugar inmejorable y que puedes recorrer fácilmente.

Los restaurantes son buenísimos, sobretodo el Adelita (mexicano) y el Bloved a pie de playa. No sabíamos si nos iba a agobiar pasar algunos de los días del viaje en un resort, pero como fuimos haciendo buceo y visitando algunas ruinas no se nos hizo nada pesado.

En Punta Maroma elegimos una opción más económica. Este hotel a muy buen precio está a pie de carretera y a corta distancia de la playa. Se trata del Amarte Maroma Hotel Eco Boutique Spa. Las habitaciones están repartidas en una bonita zona ajardinada con una piscina comunitaria, son amplias y muy limpias. Está en una zona tranquila pero cerca de todo.

Península de Yucatán: ¿Algo más? Mucho por ver…

Indudablemente esto es tan solo un pequeño resumen de lo que nosotros en apenas 10 días visitamos en dicho primer viaje. La Península de Yucatán conformada por tres estados distintos es enorme y ya en sí merece la pena un viaje por si misma.

En este segundo y último viaje pudimos seguir conociendo Quintana Roo más hacia el sur. Llegamos hasta la Costa Maya, con dos lugares tan bonitos como Mahahual y Laguna Bacalar o la Reserva de la Biosfera Sian Ka’an.

El estado de Yucatán tiene la ciudad colonial de Mérida como cabecera, la más grande de la zona. Posee pueblos mágicos como el de Izamal, reservas de la biosfera y parques naturales como Celestún o Río Lagartos. También la reserva estatal geohidrológica Anillo de Cenotes que es impresionante y única en el mundo.

Si se está dispuesto a hacer km bien los vale el estado de Campeche con la ciudad colonial de San Francisco de Campeche y la Reserva de la Biosfera Calakmul. Pero todo esto y más ya es otra historia…